Monroy recibe con alegría la grata noticia de que posiblemente la fundación Pablo Palazuelo empiece a desarrollar ciertas actividades en el pueblo y concretamente en el castillo. Esta decisión no debe de extrañar ya que el pintor pasó en este pueblo una parte importante de su vida conviviendo con sus gentes y su entorno.
La presencia de Palazuelo en Monroy marcó una época tanto por su importancia como por su significado. Todavía hay muchas personas que recuerdan los trabajos de restauración y acondicionamiento del castillo-palacio, su transformación paulatina y el marcado sello personal que el pintor iba dejando en cada una de las decisiones arquitectónicas.
Jóvenes de aquella época, próximos al pensar y sentir de Palazuelo, lo recuerdan con agrado y simpatía pues con él compartieron las más variadas reflexiones filosóficas y pudieron comprobar también la profundidad de su pensamiento y la entrega de su vida al trazado geométrico de su obra. Por eso, que parte de la obra de Palazuelo se muestre en donde pasó posiblemente los años más fecundos, creadores y felices de su vida es una decisión sabia por parte de quienes deben tomarla y además porque se sitúa en un marco incomparable como es el castillo que el pintor preparó para su uso, disfrute e inspiración. Esta buena noticia es necesario relacionarla con el 700 aniversario de la fundación de la villa de Monroy que tendrá lugar el año 2009. Si los monroyegos ya se encuentran ilusionados con lo que será Monroy-2009 en todos los sentidos y especialmente en el cultural, el que la fundación Pablo Palazuelo empiece a desarrollar aquí algunas de sus actividades rebosa todas las ilusiones.
La presencia de Palazuelo en Monroy marcó una época tanto por su importancia como por su significado. Todavía hay muchas personas que recuerdan los trabajos de restauración y acondicionamiento del castillo-palacio, su transformación paulatina y el marcado sello personal que el pintor iba dejando en cada una de las decisiones arquitectónicas.
Jóvenes de aquella época, próximos al pensar y sentir de Palazuelo, lo recuerdan con agrado y simpatía pues con él compartieron las más variadas reflexiones filosóficas y pudieron comprobar también la profundidad de su pensamiento y la entrega de su vida al trazado geométrico de su obra. Por eso, que parte de la obra de Palazuelo se muestre en donde pasó posiblemente los años más fecundos, creadores y felices de su vida es una decisión sabia por parte de quienes deben tomarla y además porque se sitúa en un marco incomparable como es el castillo que el pintor preparó para su uso, disfrute e inspiración. Esta buena noticia es necesario relacionarla con el 700 aniversario de la fundación de la villa de Monroy que tendrá lugar el año 2009. Si los monroyegos ya se encuentran ilusionados con lo que será Monroy-2009 en todos los sentidos y especialmente en el cultural, el que la fundación Pablo Palazuelo empiece a desarrollar aquí algunas de sus actividades rebosa todas las ilusiones.
Jesús Baños
1 comentario:
Seria un honor para Monroy que esta noticia se hiciera realidad ya que todos nosotros nos sentimos orgullosos de haber tenido en nuestro pueblo a este ilustre pintor.Quienes le conocimos podemos decir mejor a esta magnifica persona.
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